Salvo para algunos ingenuos usuarios de la “libertad y democracia” occidental, la intervención de EEUU en Venezuela es clara e inobjetable, tanto como lo es la conspiración de la ultraderecha financiada por los poderes fácticos y oficiales de ese país. La confrontación entre Venezuela y EEUU se da en varios frentes. Todo hace aparecer que mataron a Hugo Chavez con la misma tecnología de provocarles cáncer mediante “campos de ondas de radio”, lo mismo han hecho, aunque de  manera incompleta, con Ignacio Lula da Silva, Dilma Rousseff, Fernando Lugo, Cristina Kirchner, Juan Manuel Santos, entre otros. Nadie que pretenda autodeterminación está a salvo. 

El intento de bajarse a Maduro a como dé lugar, no es aislado, es sistemático y de largo plazo.  Ya lo sufrieron Manuel Zelaya en Honduras (2009) y la intentona con Rafael Correa de Ecuador (2010). Pero, ¿por qué tanto esmero en bajarse a Maduro? ¿Será que está violando los DDHH? ¿Qué no respeta las reglas de la democracia?  Ese es el argumento de EEUU y la oposición.

Ya pue compañeros, no seamos ingenuos. ¿Acaso en EEUU no se viola sistemáticamente los derechos humanos en todo el mundo? ¿No es suficiente que los estudios ordenados por la ONU han dicho que EEUU es el mayor violador de los DDHH en el mundo? ¿Acaso no es propio del poder imperial, como EEUU, negarse a ser parte del sistema de defensa de los DDHH?

No seamos ingenuos. Elementales análisis de quienes hacen uso de la objetividad, establecen que detrás del discurso USA por los DDHH y la democracia, está el interés económico, político y geopolítico de recuperar el control del petróleo que el proceso bolivariano ha despojado de la derecha venezolana vinculada a los poderes fácticos de EEUU. Bajarse a Maduro y con él a toda la institucionalidad montada por el proceso bolivariano, no es una cuestión de defensa de los DDHH y de la democracia por EEUU, sino el cínico interés de recuperar los beneficios de poder que otorga tener bajo control el petróleo.

Miren estos números: las reservas probadas a 2014 de Venezuela son del orden de 298.4 millones de barriles, mayor a la de Arabia Saudita (267.5 millones). Es decir, crudo para más de 200 años. No estamos hablando de cualquier cosa. Es la primera potencia petrolera en términos de reservas. Ver http://economia.noticias24.com/noticia/109376/incorporan-1-673-729-mbn-de-nuevas-reservas-probadas-de-petroleo-a-nivel-nacional/

¿Es posible creerle a EEUU que está luchando por los DDHH y la democracia en Venezuela? Imposible, no se explica de otro modo la abundante inyección de recursos a los más recalcitrantes opositores a Maduro, meter su “inteligencia” en todos los estamentos de la sociedad venezolana, desatar una guerra mediática sin precedentes, etc.

Amigos de la izquierda, no digo que hay que reventarle cuetes a Maduro, hay que decirle que la paz y el diálogo es la mejor manera de resolver los problemas internos. Pero no podemos callar la agresión imperialista. No usemos los errores de Maduro para ocultar el atropello de EEUU.